Hija de las tinieblas - Kiersten White

¡Hola a todos! ¿Cómo están? Espero que muy bien, en mi caso, y por acá, están los días lluvioso, esos donde solo queres acostarte en la cama, leer un poco y mirar la televisión. Pero hoy sacó un poquito de mi tiempo para poder traerles esta reseña, de un libro que es espectacular, pero del cual no puedo recomendárselo a todos. 

Hija de las tinieblas – Kiersten White 

VRYA - 496 páginas 

Con la colaboración de: VRYA 

“SU COLUMNA VERTEBRAL ERA ACERO; SU CORAZÓN, UNA ARMADURA; Y SUS OJOS, FUEGO”.

Nadie espera que una princesa sea brutal. Pero Lada, la hija de Vlad Drácula, siempre lo fue. En cambio, su hermano Radu es un joven gentil, inteligente y sensible. Todo lo que Lada y su padre desprecian. Cuando Drácula condena a sus hijos al destierro y los deja en manos del sultán otomano, Lada y Radu conocen a Mehmed. Por primera vez, Radu siente que tiene un verdadero amigo y Lada tal vez encuentre en él a alguien por quien valga la pena sentir algo. Para Radu, el imperio otomano es su hogar. Para Lada, el enemigo. Ella será capaz de sacrificarlo todo con tal de volver a su amada tierra. Lada, Radu y Mehmed crean un triángulo oscuro y apasionado, que desafiará todas las reglas, lealtades y sentimientos.  Kiersten White nos trae una impactante historia sobre intrigas políticas, en la que se cortarán cabezas, se empalarán cuerpos y se romperán corazones.

 Opinión personal

De Paranormal - otra trilogía de la autora, que lamentablemente por acá no llegó la tercera parte- a este pedazo de libro hay mucho trecho. Se nota un cambio radical tanto a la temática como en la estructura narrativa. Cuándo me dispuse a leer Hija de la tinieblas y ya habiendo leído Paranormal- que hacía hincapié en la relación amorosa de la protagonista-, iba un poco prevenida de lo que me podría encontrar en este; aun así mi sorpresa fue tal al descubrir que Hija de las tinieblas es un libro muchísimo más maduro, mucho más violento y en donde no hay para nada clichés -¡por fin!-.

Ha sido una lectura que disfruté desde que comencé a leer hasta que lo terminé. Me lo llevaba en los viajes, y aunque viajaba parada yo iba con el libro en la mano, entre clases, también leía un poco más: imaginen lo enganchada que estaba. En fin, me pareció un libro estupendo, sumamente crudo y violento, que me ha encantado, y del cual no veo la hora de leer su continuación. Pese a esto no se lo recomiendo a gente sensible o quienes no le guste leer libros con mucha sangre o sumamente violentos, ya que hay escenas y escenas de lo más crudas y bastante gráficas. Me habían advertido de que sería así, y sí lo es y bastante. Sin embargo, pueden disfrutarlo las personas que estén cansadas de los clichés  y de las protagonistas que deben ser rescatadas, porque en este caso la protagonista no necesita de nadie. Además, es un aliciente que se forme un triangulo amoroso donde  los dos hermanos protagonistas, varón y mujer, estén enamorados de la misma persona... no sé ustedes pero yo nunca leí nada así. 

Con respecto a la trama, creo que la sinopsis es bastante explicita. Ambos hermanos son moneda de cambio para su padre, Vlad Drácula. Este es un personaje que puede prescindir de ellos, por lo cual son enviados con el sultán para seguir manteniendo su liderazgo. Puede decirles, y reiterarles que la historia es muy cruda y hay situaciones y escenas muy chocantes y fuertes, ciertos personajes son realmente muy violentos y sádicos. Por lo tanto, no se lo recomiendo a cualquiera. El estilo de la autora, por otro lado, es sencillo, ya que al ir narrando la historia a dos voces; desde la perspectiva de Radu como de Lada, la historia va cambiando escenario, con cada uno de ellos, y así podemos conocer mejor la historia. También es muy descriptiva, no tiene tapujos a la hora de describir los asesinatos o los ajusticiamientos. 

Ahora bien, con los dos hermanos me pasó algo curioso. Al principio me gustaba la personalidad de Lada - fuerte y aguerrida para hacerse camino en un mundo de hombres- y aborrecía la de Ruda -sufrido, llorón e inseguro-. Miren esta frase de Lada, y díganme si no la aman:

"En nuestra noche de bodas - expresó ella -, te cortare la lengua y me la tragare. De esa manera, las dos lenguas que pronunciaron los votos matrimoniales serán mías y solo me habré casado conmigo misma. Lo más probable es que mueras desangrado, lo cual será lamentable, pero al menos no me trasformare en una viuda digna de compasión, sino que ocuparé el papel de ambos esposos".

A la mitad de la historia amé a Ruda -cambia completamente de personalidad- y odié a su hermana -cuando empieza una relación con Mehmed no la soporté-, y al final del libro los comprendía a ambos -las decisiones que toman son muy coherentes con la historia. Una vez que lo terminé no sabía con cual quedarme. Me han gustado ambos por igual. Por otro lado, y en cuanto a Medmed, este no ha sido de mi agrado. Su futuro es ser sultán, y lo único que hacer es huir. Me ha parecido un personaje muy maleable, que además no sabe defenderse solo y que se deja llevar fácilmente por lo que le dicen los demás. 

Por último, los capítulos finales han sido de lo mejor. Me encanto la decisión que toma la protagonista, excelente y muy acertada. Radu, por otro lado, también comprendo su decisión, aunque no la comparto. Y ahora necesito la segunda parte, que sí mal informada no estoy, todavía no salió en Estados Unidos.

En fin, mi recomendación es: Léanlo si buscan un libro fuera de lo común, con una protagonista fuerte, audaz y asesina; con un triangulo amoroso que involucra a dos hermanos, y con una historia violenta y sanguinarias. Eso sí, aquellos que sean susceptibles ante tanta sangre, mentiras y violencia, les recomiendo que no lo lean. 

Continua en: 

P.D: Por cierto, ambas portadas me encanta, tanto en la que aparece Lada como la de la flecha. Y presumo qué como la primera parte tiene la de la lanza la primera será la portada que tendremos acá.

Qué me dicen: ¿quieren leerlo?